Episode 461: 24 de Enero del 2025 - Devoción matutina para Adultos - ¨Con Jesús Hoy"

====================================================SUSCRIBETEhttps://www.youtube.com/channel/UCNpffyr-7_zP1x1lS89ByaQ?sub_confirmation=1==================================================== DEVOCIÓN MATUTINA PARA ADULTOS 2025“CON JESÚS HOY”Narrado por: Exyomara AvilaDesde: Bogotá, ColombiaUna cortesía de DR'Ministries y Canaan Seventh-Day Adventist Church ===================|| www.drministries.org ||===================24 de EneroAbejas Y moscas«El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo, porque de la abundancia del corazón habla la boca» (Luc. 6: 45).Cuando vivíamos en Suiza, muy cerca de nuestra casa había una magnífica pradera. Nos llamaban la atención los zumbidos de los innumerables insectos que se alimentaban en esos prados. Las abejas acudían allí de a miles a libar el néctar de las flores. Sin parar ni un instante se afanaban por recoger lo mejor de cada flor para elaborar con ello su sabrosa miel.Como en esos terrenos pastaban algunas vacas, también se encontraban por allí algunos inevitables restos orgánicos del paso de estos animales, que servían sin duda para abonar el campo. Las abejas los ignoraban por completo, mientras que las moscas se concentraban todas justo allí, pasando totalmente por alto la existencia de las flores.La pradera tenía para todos la misma cantidad de flores y la misma cantidad de estiércol. Las abejas solo se paraban en las flores. Las moscas solo se detenían en la basura. Es más, hasta en el vertedero más repugnante, la abeja se posaría solo en las flores que encontrara. Mientras que, en el jardín más hermoso y limpio de la ciudad, las moscas solo se interesarían por la inmundicia.Es evidente que tanto unos insectos como los otros se estaban comportando de acuerdo con sus propios instintos. Pero esa no es aquí la cuestión. Esta realidad me servía como una ilustración fácil de entender por nuestros nietos de dos actitudes posibles ante la vida. Como las abejas, podemos concentrar nuestra atención en todo lo bueno que nos aportan los demás y descubrir en nuestras relaciones con ellos un rico tesoro. O, como las moscas, podemos rebuscar en lo más desagradable de los demás, para retener lo peor, lo que no es más que basura, siempre hedionda y maloliente.Señor, hoy quiero llenar mi interior de todo lo bueno que encuentre, para que, como las abejas, pueda hacer con ello miel deliciosa que nutra y alimente a quienes me rodean.