Mateo 10, 7-13: San Bernabé.

1) Proclamar: somos anunciadores en lo simple y sencillo. Anuncias el Evangelio cuando visitas a una persona y compartís de la vida. Anuncias el Evangelio mensajeando a alguien que no la está pasando bien. Anuncias el Evangelio incluso cuando rezas por tantas personas... Pro-clamar es clamar con actitud y, por sobre todo, con un tinte optimista y generador de vida. No seamos profetas de calamidades en donde todo el tiempo se anuncia muerte y desesperación. Acordate que anunciamos la buena noticia que es Cristo, y no anunciamos la mala noticia, porque Cristo hace nuevas todas las cosas.  2) Curen: hoy hay muchos que necesitan ser curados por Jesús y nosotros somos sus mediadores. Llevamos su palabra, pero también esa fuerza para consolar y curar. Tenemos esa chispa de Dios que nos lleva a generar salud y vida. No estamos llamados a llevar enfermedades. Y debo reconocerte que muchos cristianos llevaron a enfermar a mucha gente y hasta le generaron psicosis. Vos y yo estamos llamados a llevar vida. 3) Saluden: estamos llamados a poner paz y a saludar, estos gestos que parece que se van perdiendo en lo cotidiano. Qué lindo poder generar paz a los que nos rodean y no ser personas de conflicto o que generen conflicto.